Trump y Maduro confirman diálogo, la oposición guarda silencio

Las declaraciones de ambos mandatarios revelaron que funcionarios de alto
nivel de sus respectivos gobiernos se reunieron para tratar de solucionar la
profunda crisis que asola a la nación sudamericana.
Pero ninguno mencionó al líder opositor, Juan Guaidó, a quien Washington y
más de 50 países reconocen como presidente legítimo de Venezuela.
Michael Shifter, presidente del centro de estudios Dialogo Interamericano,
dijo que la implicación de Estados Unidos podría ser clave para romper un
bloqueo de meses, aunque el gobierno de Trump debería tener cuidado para no
sobrepasar los delicados límites que hay en juego.
“Estados Unidos no solo tiene una oportunidad, sino también una
responsabilidad, de utilizar la influencia que tiene para tratar de avanzar en
la posición de la oposición y tratar de llegar a un acuerdo”, apuntó. “Se
extralimita cuando se mueve en direcciones que claramente no están alineadas
con lo que Guaidó respalda”.
Guaidó no abordó directamente el martes los contactos de alto nivel entre
Washington y Caracas, pero dijo que desde principios de año trabaja para una
transición pacífica. Se espera que haga declaraciones el miércoles.
“No vamos a distendernos ni un momento”, escribió en su cuenta de Twitter.
Las tensiones entre Estados Unidos y Venezuela aumentaron desde principios
de año cuando Guaidó, que es el presidente de la Asamblea Nacional controlada
por la oposición, declaró que la Constitución le daba poderes presidenciales
porque la reelección de Maduro el año pasado fue fraudulenta. Pero a pesar de
su amplio apoyo internacional, Guaidó no ha podido mermar el poder de Maduro,
en especial sobre el ejército.
The Associated Press reportó durante el fin de semana que Estados Unidos
estableció contacto secreto con el líder de partido socialista, Diosdado
Cabello, mientras allegados a Maduro buscan garantías de que no serán
enjuiciados por presuntos delitos si ceden a las demandas cada vez mayores de
que líder abandone el poder.
Respondiendo a preguntas de reporteros el martes, Trump confirmó que su
gobierno dialoga con “varios representantes” de Caracas pero se negó a
confirmar si la Casa Blanca mantiene contactos directos con Cabello.
En un acto televisado para todo el país horas más tarde, Maduro dijo que
los contactos entre representantes de los dos ejecutivos se establecieron “hace
varios meses”. Las reuniones se celebraron en lugares secretos y contaron con
su “autorización expresa”, agregó.
El líder socialista dijo
además que está listo para reunirse con el propio Trump para normalizar las
relaciones, una oferta que ya realizó en el pasado.
Un funcionario estadounidense dijo en días pasados a la AP que la meta no
es promover a Cabello como reemplazo de Maduro, sino aumentar la presión sobre
Caracas alimentando disputas que en opinión de Estados Unidos podrían estar
ocurriendo entre diferentes sectores del partido gobernante.
Durante una conferencia de prensa el lunes en Caracas, Cabello rehusó
comentar detalles sobre la reunión pero agregó que siempre ha estado dispuesto
a conversar con cualquiera, siempre que cuente con el aval de Maduro.
Shifter y otros analistas creen que cualquier comunicación entre Washington
y Caracas es un signo positivo, pero destacaron que está por ver cuál es su
contenido exacto y cómo de cerca están de hallar una solución.
“No está claro si podrán alcanzar realmente un acuerdo”, apuntó.
John Polga-Hecimovich, politólogo de U.S. Naval Academy, señaló que también
está por ver hasta qué punto está implicado Guaidó en las conversaciones, o si
lo está siquiera. Si de hecho se trata de contactos bilaterales entre los
gobiernos de Trump y Maduro, la oposición aparecería debilitada.
“El dialogo directo habla de las limitaciones de la oposición”, dijo.
Este avance se produce semanas después de que el Departamento del Tesoro de
Estados Unidos emitió nuevas sanciones contra el ejecutivo venezolano que
podrían afectar incluso a las empresas extranjeras que hagan negocios con el
gobierno de Maduro.